

«Au Lion d’or» era un café-restaurante que abrió en la Plaza del Teatro nº 2 (Rambla del centro nº 29), de Barcelona a principios de la década de 1890. Sus salones tenían una decoración más bien historicista. Fue muy popular e intelectuales y artistas, como Santiago Rusiñol, lo frecuentaban después de las funciones del Teatro.


Las fotografías del establecimiento que se conocen son de esta etapa anterior a 1915. Ese año el local se reformó, en un sentido más modernista, y se introdujeron nuevas sillas, concretamente de Salvador Albacar, con fábrica en el Camino del Grao de Valencia. En aquellos años de la llamada «Gran Guerra» (Primera Guerra Mundial») la producción de mueble de Viena de Austria-Hungría, una de las Potencias beligerantes, se colapsó y los productores valencianos de mueble curvado ocuparon el mercado local. Además Salvador Albacar tenía, desde 1907 aproximadamente, una tienda de muebles en el nº 10 de la calle Balmes. Así que es del todo lógica la elección de un modelo elegante de Albacar para dotar de sillas el café reformado.



El modelo de silla de Albacar (nº 228) era un diseño de la casa Jacob & Josef Kohn con dos barras horizontales por debajo del respaldo que apareció por primera vez con el nº 248 en el catálogo de la empresa de Viena de 1902. Hay algunas diferencias entre ellas pues la silla de Viena lleva arcos entre las patas en vez del típico refuerzo lineal de Albacar pero el diseño del respaldo es similar. Respecto al modelo de Kohn hay que decir que por sus aparentes similitudes con otro modelo de la misma firma, el nº 255, se ha atribuido a veces al diseño de Adolf Loos pero en otra entrada de este blog sobre el Café Museum de Viena hemos refutado este extremo porque la estructura del respaldo es distinta a la de de la silla del famoso café vienés.

En los años 1937 y 1938 se celebraron en el restaurante los sorteos de la Lotería, según consta en informaciones periodísticas y se puede apreciar en una fotografía de Brangulí que se conserva en el Arxiu Nacional de Catalunya.

De hecho, esta silla de Albacar en concreto, se encontraba probablemente en otros establecimientos de Barcelona en aquella época, en concreto en el Café del Rhin de la Plaza de Cataluña nº 2. Claro que, por lo que se ve en la fotografía que adjuntamos, no podemos excluir que las sillas del Café del Rhin fueran de Kohn, que tenía hasta finales de 1912 una tienda en la misma Plaza de Cataluña nº 21. El asunto queda pendiente de ulteriores informaciones.
