El Café Siller fue establecido por la familia de ese nombre alrededor del año 1900 en la Kaiser Ferdinands Platz de Viena. También se le llamó el “Café de la playa” (Strandcafé) por tener una terraza ajardinada al lado del Canal del Danubio.
Las sillas de la zona interior anexa a la terraza eran, en algún momento de la historia del café, el nº 75 de la casa Kohn, un modelo historicista con las patas delanteras en forma de columnas, barras del respaldo torneadas y decoración acanalada. Los asientos eran de chapa grabada. Se encuentra este modelo por primera vez en el suplemento al catálogo de 1898. No obstante, ya se vió un modelo muy similar, pero incluso más moderno en las formas torneadas, en la Exposición Universal de Barcelona de 1888, recogido en el catálogo de 1906 como nº 73.



A partir de los años veinte la antigua dirección del Café cambió el nombre por Schwedenplatz, 3-5. Antes de la Primera Guerra Mundial la familia Siller adquirió el vecino Hotel Germania que explotó con el nombre de Siller. El Café Siller es el escenario de un capítulo de una importante novela austríaca de Heimito Von Doderer titulada “Die Dämonen”, editada en 1956, novela cuyo relato transcurre durante los años veinte.
